Hace unos días el cartero llamaba a mi puerta para darme una grata sorpresa... y es que... mis tortas de Inés Rosales habían llegado para alegrarme el día! Enseguida las abrimos para probar aquella exquisitez y trasladarnos a una Sevilla llena de color, frescor y dulzura.
Os voy a contar un poco sobre su empresa...
En 1910, Inés Rosales rescató la receta familiar de las tortas y con ayuda de su familia y vecinas que le trasladaban en cestos de mimbre las tortas a la estación de buses de Sevilla y al cruce de caminos de La Pañoleta, ambos puntos estratégicos donde pronto se conocieron en toda España gracias al boca a boca de los viajeros que compraban sus dulces.
Desde entonces, las tortas de Inés Rosales siguen elaborándose con la receta tradicional con la que se hicieron conocidas.
Son hechas a mano una a una utilizando un aceite de oliva virgen extra e ingredientes naturales de la dieta mediterránea.
Se presentan individualmente envueltas en un papel parafinado para su mejor conservación y consumo. Además de esto son aptas para intolerantes al huevo o a la leche.
Esta es la tienda que Inés ha abierto en Sevilla, sin duda un lujo para el paladar.
Dentro de sus tortas tradicionales tiene varias variedades como las siguientes que gracias a ellos he podido degustar.
Tortas de aceite con naranja: El exquisito aroma y delicado sabor que te transportará a la magia del sur en primavera.
Tortas de aceite con canela: Con el toque especiado que le aporta la canela, Ideal para postres.
Torta de aceite sin azúcar: Adaptación de la torta tradicional para aquellos que no pueden o no quieren incluir el azúcar en su dieta.
Torta de aceite con sésamo y sal: Ideal para acompañar con canapés.
Torta de aceite con romero y tomillo: Un increíble olor a hiervas que dan ganas de comerlo a cualquier hora del día...
Muchas gracias a Inés Rosales por su colaboración.
y ya sabéis... a endulzarse un poco la vida!!!
;)
